La retracción de las encías es una complicación habitual en esta época del año, que altera tanto la imagen como la funcionalidad de nuestra sonrisa. ¿Cómo evitar las encías retraídas?
La retracción de las encías altera la salud bucal tanto a nivel estético como funcional. A nivel estético provoca la pérdida del tejido gingival, de modo que se enseña más diente de lo normal al hablar y sonreír. A nivel funcional, dificulta la limpieza bucodental y favorece la hipersensibilidad dental.
Pero, ¿Por qué tengo las encías retraídas? Estas son las principales causas:
- Cepillado dental agresivo. Es la causa más común: presionar con el cepillo de modo que dañamos el tejido gingival. Muchos pacientes creen que si mayor es la presión, mayor es la limpieza, pero en realidad sucede lo contrario.
- Enfermedades periodontales. La gingivitis y la periodontitis tiene varias consecuencias sobre la sonrisa y una de ellas es la retracción gingival.
- Bruxismo. Es el hábito inconsciente de apretar y rechinar los dientes y en la mayoría de casos se debe al estrés, también puede provocar la retracción de las encías.
Cómo evitar la retracción gingival
En función de las necesidades de cada paciente se escoge una técnica concreta para solucionar la retracción gingival. Uno de los tratamientos más habituales es el estiramiento de encías. Consiste en cubrir la raíz del diente aprovechando la misma superficie, de modo que evitamos el injerto.
Pero en otros casos el injerto gingival también es una opción a contemplar. De hecho, es muy habitual combinar ambos tratamientos. Este proceso consiste en tomar tejido del paladar mediante una mínima incisión, de modo que se cubre la encía. Después del proceso se dan dos o tres puntos para suturar.
Las encías no se regeneran por sí solas, así que el mejor modo de recuperar una sonrisa bonita y sana es acudir al odontólogo. En MyDentiss aplicamos las técnicas más avanzadas y mínimamente invasivas para tu sonrisa, para que recuperes unos dientes y encías sanos y estéticos.