El cepillado dental es esencial para mantener una sonrisa sana día a día. Pero los filamentos del cepillo no consiguen llegar con eficacia a espacios difíciles como los espacios interdentales. ¿Qué complementos ayudan a conseguir una limpieza eficaz?
Cepillarse los dientes es el primer hábito que aprendemos en relación a nuestra salud e higiene bucodental. El cepillado después de cada comida es fundamental, pero no es el único paso si queremos una sonrisa perfecta. La placa bacteriana se acumula entre dientes y encías y, con el tiempo, forma sarro.
Los 5 complementos del cepillado dental
Estas son las técnicas más recomendadas para conseguir una rutina de higiene bucodental perfecta:
1. Enjuague bucal
Es la técnica estrella para completar el cepillado dental. Probablemente porque es más práctico y rápido de usar. Al ser un líquido, el colutorio llega a todos los rincones de la cavidad oral sin problema. Además ayuda a mantener un aliento más fresco y, si contiene flúor, es un gran aliado para prevenir la caries dental.
2. Hilo dental
Junto con el enjuague es el complemento estrella del cepillado dental. El hilo permite remover los restos de comida y bacterias de los espacios interdentales. Es importante mantener una buena técnica para evitar el sangrado de las encías. Pasar el hilo dental una vez al día (en general por la noche) es suficiente para mantener a raya los restos de biofilm oral.
3. Cepillo interdental
Su uso es muy parecido al del hilo dental, pero se usa en dientes con un espacio menor. Existen cepillos interdentales de distintos tamaños en función de los dientes que queremos limpiar.
4. Irrigador bucal
La irrigación bucal es especialmente recomendada en pacientes portadores de ortodoncia. El irrigador es un aparato que aplica un chorro de agua a presión. De este modo se eliminan los restos de bacterias incrustados en la superficie dental.
5. Limpiador lingual
La lengua siempre es la gran olvidada en la rutina de higiene bucodental. Pero, ¿Sabías que alberga cientos de bacterias? Con un limpiador lingual raspamos la superficie y eliminamos estas bacterias, a la vez que conseguimos mejorar el mal aliento.
Si tenemos placa incrustada (lo que se conoce como sarro) es importante acudir a la consulta, ya que el sarro sólo se puede eliminar mediante una limpieza dental profesional. Para evitar su acumulación, es esencial una buena prevención oral no sólo en casa: también en la consulta. En este sentido, una limpieza dental profesional cada cierto tiempo ayuda a eliminar estos restos de bacterias y conseguir una sonrisa más sana y radiante.